Tener nuestro pequeño huerto es uno de los placeres de la vida. Cuando empiezas a cultivar tus hortalizas, o simplemente un pequeño jardín de flores, descubres la satisfacción de verlo crecer, pero requiere unos ciertos cuidados. Si te gustaría tener tu propio alimento para esas hortalizas o plantas deberías hacerte con un compostador.
El compost es perfecto para mejorar las propiedades de la tierra y sirve de alimento para plantas y hortalizas. A diferencia de la fertilización mineral, el abono natural ayuda a conservar y mejorar la fertilidad de la tierra. Sus beneficios están comprobados científicamente y su fabricación es relativamente sencilla.
Instalar un compostador en nuestra casa es una gran contribución a la protección de nuestro medio ambiente. No debemos olvidar que éste es un proceso totalmente natural. Otro sorprendente beneficio es la reducción de nuestros desechos domésticos, al ser reutilizados para la creación del compost. Dentro del compostador se pueden tirar residuos de frutas, hortalizas, café, hojas de té, cáscaras de huevo trituradas, flores cortadas, césped, hojas, ramas… Para un realizar un correcto compost debemos mezclar materiales mojados con secos, así como gruesos mezclados con pequeños residuos. Cuanto mejor sea la mezcla más fácil será su descomposición.
Crear el mejor compost en casa solo requiere de unos pocos conocimientos y un recipiente adecuado que te ayudará a hacerlo de una forma limpia y cómoda. A la hora de seleccionar el compostador correcto debes tener en cuenta algunos consejos básicos:
- Que el sistema tenga una buena ventilación, es fundamental para que se realice una correcta descomposición. Existen sistemas que disponen de regulación de la circulación del aire verano e invierno.
- Elige un compostador que cuente con un fácil sistema de llenado, te hará más sencillo el trabajo diario.
- Piensa en el tamaño de tu huerto o jardín para elegir un compostador con la capacidad adecuada para tu hogar.
Cuando tengas tu compostador debes elegir el lugar idóneo para su ubicación. Colócalo sobre el suelo (evita hormigón, asfalto y materiales pétreos), en un lugar soleado o parcialmente soleado.