Hasta siempre gotelé

El gotelé es una técnica que consiste en esparcir pintura al temple más espesa de lo habitual de forma que mientras se aplica aparezcan gotas o grumos que hacen que la pared sea rugosa.

Si aún no te ha quedado claro este concepto, lo que tienes que hacer es pasar la mano por la pared, si te rasca es que tienes gotelé. Muy fácil.

En casas construidas hace 20 años era una técnica que “estaba de moda” o eso nos contaron, pero en realidad se utiliza porque es muy sencillo disimular las imperfecciones en las paredes.

Si quieres deshacerte de él porque es un material muy limitado, y así poder instalar papel pintado, vinilos o simplemente dejarlo al natural.Te decimos cómo hacerlo:

La primera opción que tienes es rascar la pared y después lijarla y darle una capa de pintura.

La segunda opción es aplicarle una pasta niveladora. Para ello tenemos que limpiar la pared. Este trabajo se puede realizar realizar con un cepillo (para eliminar la suciedad y así lograr que la pasta se pegue correctamente). Después hay que realizar la mezcla del producto añadiendo agua. Se amasa la pasta con el líquido hasta que la densidad sea la adecuada. A continuación se aplica la masa en la pared con la ayuda de una espátula, hay que extender el producto en abundancia para evitar irregularidades y dar un mínimo de dos manos.

La ventaja del producto es que tarda poco en ganar cohesión al mezclarse y en adherirse, por eso, no es necesario esperar a que la mano anterior se seque para aplicar la nueva: las daremos consecutivamente.

Después de asegurarnos de que la pared ha quedado lisa y uniforme, esperamos a que se seque. Por último hay que lijar la pared y pintar con un esmalte acrílico al agua que, además de proteger la pared, aporta el toque de color que se elija.

En estos posts te damos consejos a la hora de pintar tus paredes:

Pintar las paredes para principiantes

Colores por aquí, colores por allá

vía: monicacastillo